El Evento
Una semana antes algunos líderes juveniles de la Comuna 10 fueron convocados por la Dirección de Cultura del municipio de Neiva a diseñar y coordinar algunas actividades en el marco de la que en boca de los funcionarios de la Alcaldía de Neiva llamaron la Feria del Arte y la Alegría, actividad que se realizó en todas las diez comunas urbanas de la ciudad y que para la Comuna 10 se desarrolló el domingo 26 de marzo de 2006, actividad que abrió desde las 9:00 de la mañana y cerró con la habitual rumba crossover reggetonera de la emisora Tropicana Stereo 98.3 FM de la cadena radial Caracol a las 9:30 de la noche.
De la misma manera como suenan los martillazos taciturnos y tortuosos al comienzo de la sepulcral melodía en Crucifixion de Lacrimosa, una banda de Gothic Metal, así mismo fueron los minutos, las horas y los días que nos acercaban mas y mas al rechinar absorbente de guitarras en distorsión y al Gutural; la primicia en la Comuna 10 de Neiva ya se acercaba. Las llamadas al celucho de Omar Perdomo, guitarrista de la banda gruncheta Cual y a Juan Nicolás Jara Ordóñez, Mauricio Vejarano, guitarro y batero respectivamente de la banda de Brutal Death Insane Butchery Disease incrementaron la deuda del novato coordinador en ésta clase de eventos con doña Maria Consuelo Méndez, la vecina que siempre le fía los minutos para no quedar incomunicado con los que nunca se comunican con él.
Los martillazos continuaros hasta cuando de parte de Henry Pérez, coordinador por la Alcaldía de las Ferias en las diferentes zonas de la ciudad resultó con algunas ayudas, resultado éstas de las gestiones realizadas en días pasados. Es así como Insane Butchery Disease (que traduce Enfermedad de Carnicería Insana) y Cual confirmaron su entrada a ésta plaza de oriente para exorcizar con sus “suaves” melodías la brutal atmósfera vestida de funerales tonos oscuros.
- Que se la consigan alquilada- decía Vejarano el dueño de la única batera disponible en buen estado que se hallaba a los alrededores. No la quería prestar a ninguno. De hecho, ya lo había hecho en otros tiempos y no la regresaban en las mejores condiciones.
- Viejo, no hay plata. Solo tenemos lo del transporte. La que tiene este man de Plazas está un poco deteriorada- contesta Omar Perdomo que junto a Fredy Nagles buscaron todos los medios posibles para conseguir una batería para inaugurar el Primer Barrio Metal Festival. Después de mucho insistirles, tanto a Vejarano “Caballo” como a Oscar Plazas, los dos resolvieron llevar cada uno su respectiva batera.
Llega 3:30 de la tarde de aquel domingo 26 de marzo y casi no había batería pero se logra el propósito y es en una camioneta blanca Chevrolet Luv 2300 que se logra transportar los 14 músico de las dos bandas de Grunch y Brutal Death.
Comienzan a instalar batería y a cuadrar guitarras la banda Cual eso de las 4:30 de la tarde. En medio de la instalación, los últimos pasos coreográficos de Scorpion, la agrupación de porrísmo de la Comuna 10, daba su despedida al público en la tarde cultural en el marco de la Feria del Arte y la Alegría en la Comuna 10.
Los aplausos empezaban a sonar en primer plano, agradeciendo a los muchachos Scorpion su acto cultural y en medio de éstos, las tonadas que se fundían con el aplauso de quienes no sabían que seguiría a continuación. Al final y queriendo reprochar las melodías guturales de un CD que se le había pedido que colocase a un técnico que trabajaba con los dueños del sonido para el acto, se dio el Primer Barrio Metal Festival 2006. El volumen con sonido entre digital y análogo que provenían de las potentes cabinas reproducían suaves, derrumbantes y envolventes tonadas de Death, una banda gringa de Grinh Death Metal y de Opera, otra banda femenina británica de Heavy Metal.
- Muy buenas Tardes, somos Cual-
Llega y se tercia con la correa la guitarra a sus hombros y empieza Oscar Corzo y Omar Perdomo a tocar covers de algunos grupos. Después de cuatro canciones, entre las que se cuenta una en especial de autoría de Oscar que dedicó a su novia Verónica, terminan con una de los Smashing Pumpkins.
Es así como al término de gruncheteo, entra a escena Insane Butchery Disease con un tema de su autoría, la canción Master of Poper de Metallica, Dios a Muerto de Akutor, una banda de Death Metal de Medellín – Colombia, y cierran la jornada cultural con otro tema de su autoría.
La demencia se apoderó y los principados ocultos tras las imágenes de sus camisetas negras llenó la escena contribuyendo así a una audaz elocuencia entre lo que es el metal como cultura urbana juvenil y la libertad de expresión. El pogo en algunos y el batir de cabezas en otros, las camisetas y pintas negras en ellos y los labiales escarlata, sombras, y vestidos oscuros de princesas vampiresas en ellas dieron un ambiente no habitual en el Parque Metropolitano de la Comuna 10 del Oriente Alto de Neiva.
En opinión de estos seres animados que se tomaron en la tarde del 26 de marzo las instalaciones del Parque Metropolitano, la necesidad de expresarse a favor o en contra de algunos aspectos de la realidad y canalizar así sentimientos románticos de frialdad por medio de la música es lo que hace que no se pierda una cultura que se globaliza colores, sabores, conceptos y modos de asumir la vida y la historia. Por otro lado, la búsqueda de identidad y acentuar su presencia en el escenario público son otras razones por la que se organizan todo proyectos alrededor del metal, como música que culturiza y afianza modos de construcción del joven como actor válido en la esfera pública.
“Sabemos de que esta música es foránea pero en la medida en que nos vamos apropiando de ella; en la medida en que decodificamos y jugamos con su estética, con contenidos que expresen mucho mejor nuestro contexto pero guardando su forma, en esta medida la hacemos nuestra” argumenta Andrés Felipe García García, vocalísta de Insane Butchery Disease que desde éste tipo de música se ha formado, al igual como Julio Cesar Ibarra, Juan Nicolás Jara Ordóñez y Mauricio Vejarano “Caballo” como, guitarristas y bateros… como músicos y no como otra cosa.
Las manifestaciones culturales tales como los bailes, las costumbres, las músicas son simbologías de una realidad que particularmente cada grupo interpreta y asume. Estas manifestaciones están en constante cambio y por tanto enmarcan un conjunto de interpretaciones y expresiones del conflicto que cambian de igual forma. En ésta medida, la cultura underground del Metal es un conjunto de significados cambiantes que recogen el sentir de una humanidad agobiada por el terror, la miseria de la vida y lo mas temido y odiado por la humanidad. Esta es una reflexión para todos aquellos que ignoran lo que hay tras algunas actuaciones de los jóvenes y los hacen víctimas de atropellos, solo por el hecho de pensar, sentir, asumir y vestir de forma diferente y no cuadricularizar su joven existencia como el sistema, los “buenos modales” y la moda se lo impone a través de los alienantes medios masivos de información.
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